DENN SO IST DAS VERF*CKTE LEBEN / ASÍ ES LA VIDA, J*DER: ANÁLISIS CONTRASTIVO DE LOS ACTOS DE HABLA DESCORTESES EN ESPAÑOL Y ALEMÁN A TRAVÉS DEL DOBLAJE Y SUBTITULADO DE LA PELÍCULA ISI & OSSI (2020)

Elia Pedrosa Vidal

Universität Heidelberg

elia.pedrosa_vidal@stud.uni-heidelberg.de


Fecha de recepción: 23.09.2023 Fecha de revisión: 18.10.2023 Fecha de aceptación: 02.11.2023


Resumen: Las manifestaciones de descortesía en las diferentes lenguas han sido con poca frecuencia objeto de estudio lingüístico. En las últimas décadas, sin embargo, se ha notado un creciente interés por este tipo de actos de habla, tanto desde un punto de vista pragmático, como sociolingüístico, sociocultural y psicológico. Los insultos y las palabrotas no solo tienen una función emotiva y afectiva, sino que son además una muestra muy clara de la interconexión entre lengua y cultura. En este trabajo se pretende ahondar en esta relación en el caso concreto de la lengua alemana y su léxico soez, así como establecer una comparación con el español e intentar explicar las principales diferencias y similitudes en cuanto a temas y formas entre ambas lenguas. Dicha comparación se reflejará posteriormente en el análisis contrastivo de la versión original de la película alemana Isi & Ossi (2020) y sus traducciones al español para doblaje y subtitulado.


Palabras clave: descortesía, alemán, español, Isi & Ossi, traducción audiovisual.


Denn so ist das verf*ckte Leben / Así es la vida, j*der: Contrastive Analysis os Spanish and German impolite speech acts based on the dubbing and subtitling of the film Isi & Ossi (2020)


Abstract: Impolite utterances in different languages have rarely been the subject of linguistic study. In recent decades, however, there has been a growing interest in this type of speech act, whether from a pragmatic, sociolinguistic, sociocultural or psychological point of view. Insults and swear words not only have an emotive and affective function but are also a perfect example of the interconnection between language and culture. The aim of this paper is to explore this relationship in the specific case of the German language and its swear words, as well as to make a comparison with Spanish and try to explain the main differences and similarities in terms of topics and forms between the two languages. This comparison will later be reflected in the contrastive analysis of the original version of the German film Isi & Ossi (2020) and its Spanish translations for dubbing and subtitling.


Keywords: impoliteness, German, Spanish, Isi & Ossi, audiovisual translation.

Sumario: 1. Introducción. 2. La cortesía y la descortesía. 2.1. Una cuestión cultural. 2.2. La descortesía en la traducción audiovisual. 3. Los actos de habla descorteses. 3.1. Tipos de actos de habla descorteses en Isi & Ossi. 3.2. El léxico descortés alemán frente al español. 4. La traducción de la descortesía en Isi & Ossi. Conclusiones. Anexo.


Introducción

En su obra de 1962, Austin formuló por primera vez la tesis de que hablar consiste en “hacer cosas con palabras”: «the uttering of the sentence is, or is a part of, the doing of an action» (Austin 1962: 5). En este trabajo vamos a centrarnos, concretamente, en esas ocasiones en las que la palabra se utiliza para “hacer cosas malas”, es decir, esas interacciones lingüísticas que perjudican a nuestro interlocutor y rompen el equilibrio comunicativo.

Uno de los aspectos más destacables de la descortesía es su dimensión cultural. Si bien en todas las sociedades existen comportamientos corteses y descorteses, su falta de universalidad radica en la multitud de formas y situaciones en las que estos se manifiestan en cada cultura (Kerbrat- Orecchioni 2004). El objetivo principal de este análisis contrastivo, centrado en las culturas alemana y española, es precisamente encontrar similitudes y diferencias entre ambas en lo referente a la descortesía, para lo que nos basaremos en muestras de habla extraídas de una película alemana y su traducción al español para el doblaje y subtitulado.

En 2020 se estrenó en Netflix la comedia romántica juvenil Isi & Ossi, escrita y dirigida por Oliver Kienle. Dicha producción constituye un objeto de


estudio perfecto para nuestro trabajo, pues las manifestaciones de descortesía son especialmente numerosas, por varios motivos. En primer lugar, los protagonistas pertenecen a dos estratos sociales completamente diferentes, pues Isi es hija de una familia millonaria de la elegante ciudad de Heidelberg mientras que Ossi vive con su madre soltera y su abuelo problemático en los suburbios de la ciudad vecina de Mannheim. En segundo lugar, los protagonistas hacen uso del lenguaje juvenil, en el que proliferan lo descortés y lo vulgar. Por último, el abuelo de Ossi acaba de salir de la cárcel y se dedica a rapear en locales clandestinos, por lo que su forma de hablar presenta fuertes influencias de este contexto marginal. Todo ello da como resultado un discurso donde la descortesía es la norma y donde los aspectos sociales, culturales y generacionales impregnan el habla de todos y cada uno de los personajes.

Tras el visionado de la película, se ha realizado un análisis contrastivo del original y sus versiones para doblaje y subtitulado en español con los siguientes objetivos en mente: a) clasificar los actos descorteses según su fuerza ilocutiva y comprobar si esta se mantiene o se modifica en español; b) determinar cuáles son, si las hubiese, las principales diferencias en cuanto a la descortesía en ambas lenguas, ya sea a nivel pragmático o léxico; y c) analizar las estrategias traductológicas empleadas para mantener, adaptar u omitir este tipo de unidades. Toda la información recogida se reflejará en una tabla, adjuntada a modo de Anexo.

  1. La cortesía y la descortesía

    1. Una cuestión cultural

      Para entender qué es la descortesía hemos de remontarnos, según Díaz (2012: 68), a 1975, año en el que Grice expone su Principio de Cooperación, del que surgirán posteriormente las teorías de la cortesía. Lo que afirmaba este autor, a grandes rasgos, es que durante una conversación se establece entre los interlocutores una especie de acuerdo por el cual han de cooperar para conseguir un intercambio comunicativo eficaz y satisfactorio (Díaz 2012: 68). Para ello han de seguirse unas máximas determinadas: calidad (lo que se dice debe ser verdadero), cantidad (debe tener la suficiente extensión), relación (ha de ser relevante en el contexto de la interacción) y modalidad (ha de ser claro).


      A estas reglas para el éxito comunicativo se puede añadir una quinta, la de cortesía, que establece ese principio último que los hablantes han de respetarpara garantizar la cooperación (Díaz 2012: 69).

      Otro concepto importante, propuesto por Goffman (1967: 5), es el de “imagen” o face. Según este autor, cada persona pretende causar una impresión favorable en los demás para obtener aprobación. La imagen sería, pues, una suerte de prestigio social que podemos preservar si nos atenemos al principio de cortesía.

      Tomando las ideas de Goffman como referencia, Brown y Levinson (1987) desarrollarán la teoría más elaborada y conocida, en la cual el concepto de face será la noción central. Estos dos autores distinguen dos vertientes de esta “imagen” (Brown y Levinson, 1987: 62): la imagen negativa, más individualista, es el deseo de libertad, de no sufrir imposiciones externas, mientras que la imagen positiva es el deseo de apreciación ajena y de que los demás compartan nuestra visión del mundo. La descortesía, en este espectro, serían aquellos comportamientos destinados a destruir la imagen del otro u otros. Estos actos amenazadores o face threatening acts, como los denomina Bravo (1999: 156), son lo que en este trabajo nos ocupa.

      Esta teoría, sin embargo, ha recibido múltiples críticas debido a su etnocentrismo (se centra en aspectos característicos de las sociedades anglosajonas) y a su afán de universalidad, que la hacen insuficiente para explicar la variación cultural y contextual de la cortesía (Bravo 1999; Brenes 2006). No en todas las sociedades se conciben de la misma manera la imagen “negativa” y la “positiva”, al igual que tampoco se ven comprometidas en las mismas situaciones en una cultura y en otra. Por ello, la tendencia actual, más que buscar una sistematización universal de lo cortés y lo descortés, es describir y comparar estos aspectos teniendo en cuenta los diferentes contextos y comunidades de hablantes. Bravo, por ejemplo, rechaza los términos “positiva” y “negativa” y prefiere hablar de “autonomía” y “afiliación”, dos necesidades humanas que todos compartimos:

      Frente a esa imposición a la libertad, Bravo resalta la importancia que tienen en la sociedad española la originalidad del individuo y sus buenas cualidades como componentes esenciales de esa “imagen de autonomía”. En su artículo, reconoce una serie de premisas culturales que influyen en la imagen del individuo, como la importancia de las manifestaciones externas de aprecio


      para la confirmación de las cualidades propias o las nociones de orgullo y honor, este último muy vinculado a la institución familiar (Bravo 1999: 168)

      Contreras (2004) toma estas ideas de Bravo y señala las diferencias con el concepto de imagen alemán. Para esta autora, la imagen social alemana debería dividirse en “autonomía”, tomando los términos de Bravo, y “privacidad”, frente a la “afiliación” española (Contreras 2004: 56). En cuanto a la autonomía en la sociedad germana, Contreras habla de «orgullo de tener habilidad crítica y confianza en sí mismo», en oposición al deseo de originalidad español, por lo que existiría una clara preferencia alemana por el individualismo y una menor necesidad de validación externa. En cuanto a la imagen de afiliación, Bravo (1999: 164) describía la española como «verse o ser visto en identificación con un grupo». Contreras prefiere hablar de imagen de privacidad, la cual consiste en una «delimitación de lo privado y lo ajeno» y en una «intensificación de las relaciones internas y externas» (Contreras 2004: 58).

      Para justificar estas diferencias, Contreras compara brevemente los dos contextos socioculturales y destaca el afán de los alemanes por separar los ámbitos público y privado, que se manifiesta tanto de forma física (delimitación de los inmuebles, las puertas siempre cerradas en las oficinas, etc.) como en su carácter, que a menudo se describe como reservado y distante (Contreras 2004: 62), frente a la forma de ser más amistosa y extrovertida que caracteriza a las sociedades hispanohablantes. Estos aspectos se traslucen, por supuesto, en la forma de comunicar de cada grupo, siendo los alemanes por lo general más distantes y tranquilos que los españoles, efusivos, cercanos y dominados muchas veces por las emociones (Contreras 2004: 66).

      Se ha demostrado, por lo tanto, que, si el concepto de “imagen” no es universal, tampoco las formas que tenemos de cuidar esta imagen o, al contrario, de atentar contra ella, serán las mismas en todas las culturas. Kerbrat-Orecchioni (2004: 48) señala la existencia de variaciones en la cortesía tanto cuantitativas (en algunas sociedades, los procesos de cortesía son másnumerosos) como cualitativas (las fórmulas de cortesía utilizadas son diferentes, así como los valores que se les pueden atribuir). Estas variaciones se pueden aplicar, por extensión, a la descortesía, como intentaremos demostrar en este estudio.


    2. La descortesía en la traducción audiovisual


      Dentro de la traducción audiovisual, distinguimos dos prácticas fundamentales: la traducción para subtitulado y la traducción para doblaje. Ambas plantean una serie de desafíos al traductor que pueden implicar pérdidas tanto lingüísticas como culturales (Rioz Mateos 2010: 133). Esta autora define subtitulado como «la adaptación de un texto escrito a las características de la lengua oral, que en el ámbito audiovisual es pretendida, prefabricada y elaborada». Entre algunos de los rasgos que destaca, cabe mencionar su carácter efímero (desaparece a los pocos segundos) y la concisión, ya que debe resumir la información en entre 35 y 70 caracteres distribuidos en dos líneas (Rioz Mateos 2010: 134). Estas características contribuyen inevitablemente a la pérdida de información y afectan, mayoritariamente, a expresiones coloquiales y lenguaje tabú, que no se suelen considerar esenciales para transmitir el sentido original.

      En cuanto al doblaje, este consiste en la traducción de un texto escrito (el guion) y su adaptación a la interpretación oral posterior de los actores. Aunque en este caso la pérdida de información es menor y el traductor puede realizar una traducción más “literal” (Rioz Mateos 2010: 135), además de transmitir aspectos como el nivel sociocultural o el origen geográfico/étnico del hablante (Fuentes-Luque 2015: 4), el doblaje no está exento de dificultades, como la sincronización palabra-imagen o mantener los rasgos de la oralidad sin caer en la excesiva literalidad (Rioz Mateos 2010: 135).

      Estos problemas se incrementan al enfrentarnos al lenguaje descortés, ya que su traducción, además de estar muy marcada culturalmente y no presentar nunca equivalencias perfectas (Fernández Dobao 2006: 224), implica tomar decisiones que a veces pueden herir la sensibilidad del espectador (Ávila-Cabrera 2015: 9). Debido a esta falta de equivalencia exacta y a la imposibilidad de traducir literalmente, muchos afirman que el lenguaje malsonante es intraducible. Fernández Dobao (2006: 224), sin embargo, defiende que el trabajo del traductor es buscar el mayor grado de equivalencia entre el disfemismo de partida y el de llegada. Para ello, existen diversastécnicas de traducción, como las propuestas por Molina y Hurtado Albir (2002) y Ávila-Cabrera (2015), en las cuales nos basaremos para nuestro posterior análisis: la adaptación, la ampliación, la explicitación, la compensación, la compresión, la omisión, la equivalencia, la modulación, la reformulación, la sustitución y la traducción literal. Todas estas estrategias provocan que la fuerza ilocutiva de estos actos de habla pueda mantenerse,


      suavizarse, intensificarse, neutralizarse o desaparecer por completo en el TM (Ávila-Cabrera 2015: 16). En ocasiones, ocurre el fenómeno de la autocensura por parte del traductor (Santaemilia 2008), que puede ser consciente e inconsciente, pero se trata de una solución poco recomendable, como afirman Ogea e Hidalgo (2022: 99), ya que además de no ser fiel al TO1, tampoco lo es al público receptor, especialmente en el caso de contenido con una fuerte presencia de lo descortés y coloquial, como la película que nos ocupa, destinado a un público juvenil que espera sentirse identificado.

  2. Los actos de habla descorteses

    La descortesía se puede manifestar de diversas formas: a través de la ausencia, consciente o inconsciente, de marcadores de cortesía (por ejemplo, la descortesía por desconocimiento de las reglas pragmáticas de una lengua, algo que puede sucederles a los hablantes no-nativos) o a través de la adición intencionada en el discurso de marcadores de descortesía con intención de herir o despreciar. En este último tipo de emisiones es en lo que centraremos nuestro trabajo.

    Siguiendo la clasificación propuesta por Searle en 1976 de los actos de habla ilocutivos en cinco categorías, Díaz afirma que los descorteses encajarían dentro de los actos “expresivos”, donde el hablante manifiesta emociones y estados psicológicos y «puede recurrir al insulto, la imprecación o la blasfemia con fórmulas interjectivas, tan proclives al lenguaje malsonante, que utiliza como alivio de su ira o su tensión.» (Díaz 2012: 72). Fuentes y Alcaide (2008: 16) sostienen que los actos descorteses se dan sobre todo en «situaciones comunicativas de conflicto y polémica» y estarían relacionados con la agresividad y la violencia. Estas autoras diferencian entre agresividad verbal (un ejemplo sería la amenaza), destinada a intimidar o mantener una postura firme ante otros, y violencia verbal, que supone un daño directo a la imagen social del interlocutor, como los insultos (Fuentes y Alcaide 2008: 18).

    No todos los actos de habla descorteses que existen y que veremos en este trabajo están dirigidos contra una persona ni tienen la intención de herir la imagen social de un interlocutor humano. En muchas ocasiones, es el uso


    1 TO: texto original; TM: texto meta.


    del disfemismo lo que convierte una emisión lingüística en descortés. Díaz define el vocabulario disfemístico como:

    lenguaje sancionado, lingüísticamente marcado como vulgar, ofensivo y grosero. Ha sido estudiado como un lenguaje propio de grupos marginales […], como tabú o léxico prohibido, como propio del insulto o como lenguaje no convencional y desviación de lo correcto (Díaz 2012: 397).

    A pesar de que el ejemplo más estudiado de uso del disfemismo es el insulto, este no es el único acto de habla descortés en el que nos centraremos en nuestro trabajo. A continuación analizaremos y compararemos otros actos en los que está presente este lenguaje en la película escogida.


    1. Tipos de actos de habla descorteses en Isi & Ossi

      Para llevar a cabo nuestro análisis hemos optado por seguir la clasificación de Havryliv (2011; 2018), quien estudia precisamente la descortesía en el lenguaje juvenil alemán, predominante en la película, desde un punto de vista pragmático. Esta autora, partiendo de las teorías de Searle y sus actos de habla expresivos, decide distinguir dentro de estos el grupo de los “actos de habla agresivos” (aggressive Sprechakte) y dividirlos en las siguientes categorías según la intención comunicativa de la emisión: Beschimpfung, Fluch, aggresive Aufforderung, Drohung y Verwünschung. Además de estas cinco principales, recoge también lo que ella denomina Attraktion aggressiver Sprechakte, que sería una combinación de varios actos de habla en la misma emisión, y las observaciones peyorativas (abwertende Bemerkungen).

      La primera que reconoce es la de “insulto” (“Beschimpfung”), que define como «Prädikation, die sich mit dem Ziel, Emotionen abzureagieren und/oder den Adressaten zu beleidigen, vollzieht und in der sowohl die absolute als auch die relative (okkasionelle) pejorative Lexik zum Einsatz kommt» (Havryliv 2011: 123). Con “absoluto” se refiere a aquellos términos fijados en los diccionarios como peyorativos, mientras que los “relativos” seríantérminos neutrales que adquieren carácter peyorativo en el contexto de la emisión. Veamos los siguientes ejemplos extraídos de nuestra tabla (vid.Anexo):

      Léxico peyorativo absoluto:


      TO

      TM


      Die blöde Fotze.

      La muy zorra.

      Du bist ein Arschloch.

      Eres una gilipollas.

      Léxico peyorativo relativo:


      TO

      TM

      Mit so einem Affen!

      ¿Con este payaso?

      ¡Con un mono!

      En relación con esto, André Meinunger (2018: 116) reconoce dos subcategorías dentro de los insultos: los que incluyen geborene Schimpfwörter o “insultos natos”, que no se dirigen a un grupo de personas concreto, sino que describen a la persona peyorativamente sin hacer referencia a características específicas (por ejemplo blöde Fotze o Arschloch), y las Verunglimpfungen (denigraciones), que define como «Wörter, die Gruppen von Menschen wegen ihrer angeblichen Minderwertigkeit herabsetzen sollen». Estas son las que tienen mayor presencia en la película, donde encontramos sobre todo términos despectivos referidos a grupos étnicos concretos, homosexuales o discapacidades intelectuales:


      TO

      TM

      Bin ned dein Bruder, du bisch Kanak.

      De hermano nada, que eres moro.

      No soy tu hermano, moro de mierda.

      Sag mal, wer ist eigentlich die Schwuchtel?

      Oye, ¿quién es el marica este?

      ¿Quién es este maricón?

      Wie alt bist du, 70? Spast.

      ¿Cuántos años tienes, 70? Chiflado.

      ¿Cuántos años tienes, 70? Imbécil.


      Frente al insulto, Havryliv (2011: 132) habla del acto “Fluch” (“maldiciones” o “palabrotas”), que no requiere la presencia de un referenteo destinatario, sino que se dirige a una situación y sirve como desahogo de las emociones negativas del hablante, normalmente a modo de interjección:


      TO

      TM

      Scheiße! Hast du eine Tüte?

      ¡Mierda! ¿Tienes una bolsa?


      Scheiße. Seelischer Beistand, ne?

      Joder. Para apoyarla,

      ¿no?

      Mierda. Apoyo moral,

      ¿no?

      En el acto de habla “aggresive Aufforderung” (“interpelación agresiva”), además de reflejarse las emociones negativas del hablante, existe una intención de influir en el comportamiento del destinatario y modificarlo, desestimar al interlocutor o provocarlo. Havryliv destaca aquí la tendencia a las interpelaciones obscenas/sexuales en el lenguaje juvenil (2011: 134):


      TO

      TM

      Halt´s Maul.

      Cierra el pico.

      ¡Cállate la boca!

      Lutsch meinen Schwanz.

      Chúpame la polla.


      El siguiente acto, “Drohung” (“amenaza”), anuncia una acción del emisor, que puede o no implicar agresión, o su intención de obligar al destinatario a actuar según sus deseos (Havryliv 2011: 135):


      TO

      TM

      Also, wenn du nochmal Kanaken

      beleidigst, hau ich dir aufs Maul, Mann.

      Como vuelvas a ofender a

      los moros te reviento la boca.

      Si insultas a los putos

      moros otra vez, ¡te parto la cara!

      Ich hau dir auf die Fresse!

      ¡Te voy a reventar, sal de ahí!

      ¡Te voy a partir la cara!

      El último de los principales actos agresivos sería el de “Verwünschung” (“imprecación”), que expresa un deseo de que el destinatario, o alguien cercano a este, sufra un mal (Havryliv 2011: 139). Tanto en español como en alemán, y más en contextos juveniles, estos actos de habla tienen poca recurrencia, como demuestra el hecho de que no hayamos encontrado ningún ejemplo en la película.

      La autora habla también de Attraktion aggressiver Sprechakte, es decir, la combinación de actos de habla agresivos en situaciones de conflicto, que confiere mayor énfasis y negatividad a la emisión:


      TO

      TM


      Red keinen Scheiß, Spasti.

      Oye, déjate de rollos, ¿eh?

      No digas chorradas.

      Ach du Scheiße! Halt´s Maul!

      ¡Ay, la hostia! ¡No me jodas!

      ¡Hostia puta! ¡La leche!

      En el primer caso tendríamos la combinación de una interpelación agresiva y un insulto y, en el segundo, de una maldición y una interpelación agresiva.

      Por último, Havryliv (2011: 140) recoge las “observaciones peyorativas” (“abwertende Bemerkungen”), que pueden manifestarse de forma directa o indirecta a través de preguntas retóricas y reflejan una opinión negativa acerca de una situación, una persona o una entidad. Estas constituyen el grupo más numeroso, 68 de los 145 actos de habla encontrados (46,9%):


      TO

      TM

      Hey, Langer, was'n Oscar für'n Kack-Name?

      Oye tío, ¿qué mierda de nombre es Oscar?

      Oye, larguirucho. ¿Qué mierda de nombre es Oscar?

      Insgesamt war er 14 Jahre im Knast, nur wegen dummer Scheiße.

      En total ha pasado 14

      años en la cárcel por gilipolleces.

      Al final se ha pasado 14 años en la cárcel por tonterías.

      Was soll ich auch sonst mit dem Scheiß, oder?

      ¿Para qué me iba a

      servir esta mierda si no?

      ¿Para qué más serviría este talento de mierda?


      Un fenómeno muy interesante, presente en la película y especialmente ligado a la forma de hablar de los jóvenes, es el uso “ritual” del insulto y la palabrota (Havryliv 2011: 130). Esta idea no es original de Havryliv, sino que surge de las investigaciones que William Labov llevó a cabo en 1972 (vid. Zimmermann 2005: 249), tomando como muestra los intercambios descorteses entre jóvenes neoyorquinos de grupos sociales marginados. De sus análisis se llegó a la conclusión de que se trata de un tipo de juego en el que los participantes saben que lo dicho no refleja una opinión real y contrarrestanese insulto de manera original o creativa (Zimmermann 2005: 250). De ahí surge, de hecho, el fenómeno de la batalla de rap (Chemeta 2013) que tiene tanta relevancia en el argumento del film. Veamos el siguiente ejemplo de respuesta del abuelo de Ossi durante una de estas batallas verbales:


      TO

      TM

      Du nennst mich 'Alter Sack' und ehrlich, ich geb dir recht, weil ich deine Oma gefickt hab, zur Zeit von Bertolt Brecht.

      1960 war ich Hippie, fickte weitere Verwandte, auf LSD sogar vesehentlich den Mann deiner Tante.

      Wir trafen uns zum ersten Mal im Bauch deiner Mutter und weil du meine Eichel so oft gesehen hast bist du jetzt so ein Schwanzlutscher.

      [...] Und ich rutschte in den Rest deiner ganzen beschissene Familie rein. Nur deine Schwester, dass wir uns da im Klaren sind,

      fass ich nicht an, fick doch nicht mein eigenes Kind

      Me llamas viejales y tienes toda la razón porque me follé a tu abuela cuando Bertolt Brecht era un mocetón.

      Me follé a más de tu familia en los 60, cuando era jipi, una vez me follé a tu tío cuando iba puesto de tripis.

      Hermano, cuando nos conocimos seguías dentro de tu vieja y como conoces tan bien mi polla no te comes ni una almeja.

      [...] Me tiré a los demás, no fue solo un sueño, pero a tu hermana no me la puedo follar. Nunca tocaría a una hija mía.

      Si bien los insultos y observaciones peyorativas tienen un papel protagonista, estamos ante un uso puramente lúdico del disfemismo. Zimmermann (2005: 249) acuña el término anticortesía para referirse a este tipo de actos de habla que no tienen la función de ofender. Este autor elabora una lista de las características más significativas de este tipo de lenguaje: son jóvenes los que lo utilizan, suelen ser varones, sus insultos tienen un carácter contranormativo (quebrantan las normas de cortesía impuestas por los adultos) y, además, sirven para construir una identidad cultural y generacional mediante el discurso (Zimmermann 2005: 250).

      Tomando Isi & Ossi como referencia, sin embargo, habría que hacer un apunte a estos rasgos propuestos:

      - Si bien lo anticortés aparece en mayor medida en las emisiones de personajes masculinos, tenemos también ejemplos de mujeres que lo utilizan, como la cocinera de Isi:


      TO

      TM

      Widersprich deine Chefin nicht,

      wenn sie versucht, cool zu sein, du Arsch!

      No le repliques a la

      jefa cuando intenta ir de colega, idiota.

      No contestes a tu jefa

      cuando intenta ser guay, imbécil.


      - No solamente los jóvenes, sino gente de mayor edad, probablemente por “contagio” (proximidad al contexto juvenil, estancia en la cárcel, etc.) o imitación, hacen uso de este lenguaje. De nuevo tenemos como ejemplo al abuelo de Ossi, quien emplea expresiones muy alejadas de la forma de hablar “propia” de su generación:


      TO

      TM

      Legende fickt eure Tanten.

      Leyenda se follará a vuestras tías.

      Klar bin ich cool. Klugscheißer.

      Yo estoy tranquilo. Listillo.

      Vale, me relajo. Listillo.

      El fenómeno de la anticortesía se puede identificar tanto en el habla de jóvenes alemanes como españoles, si bien entre estos últimos, al igual que sucede en Italia, Turquía y algunos países de Oriente Próximo, como señala Havryliv (2011: 130) es más común el uso de la palabrota o insulto de manera ritual. Sin embargo, el texto español al que nos enfrentamos es la traducción de un original alemán, por lo que no podemos ver esa diferencia idiomática de la misma manera que en un TO en lengua española, sino que se mantienen los usos anticorteses de la película.

      Los ejemplos expuestos y su traducción han mostrado que es posible trasladar todos los actos de habla propuestos por Havryliv al español. En la traducción y subtitulado de la película veremos que la función expresiva, o fuerza ilocutiva, se mantiene en la gran mayoría de los casos: las amenazas se mantienen como amenazas, los insultos, como insultos. Como en todo estudio contrastivo, se han encontrado excepciones, especialmente en los subtítulos:


      TO

      TM

      Kannst du mal aufhören, so bescheuert zu

      grinsen?

      Subt.: Borra esa estúpida sonrisa

      Diese Idioten! Wichser alle, diese ganze… Scheißbande, diese Idioten, die.

      Subt.: ¡Que los jodan! ¡Que los jodan a todos!

      ¡Imbéciles!

      Bau ist Scheiße, aber jemand muss diesen Kack machen, und ich kann nichts.

      Subt.: Tiene que haber albañiles. Y no sé hacer otra cosa.

      En el primer ejemplo vemos como en el subtítulo se ha sustituido la observación peyorativa por una interpelación agresiva. En el segundo, los


      insultos se han convertido también en interpelaciones agresivas. En el último, lo que tenemos es directamente la omisión de la carga ofensiva, algo que ocurre con frecuencia en la traducción para subtitulado, aspecto que comentaremos más adelante. Las principales diferencias que podemos observar entre las dos lenguas a través del análisis no tienen que ver, sin embargo, con la tipología de los actos, sino con su codificación léxica, es decir, con las palabras que en cada una de las culturas se consideran peyorativas u ofensivas.

    2. El léxico descortés alemán frente al español

      Anteriormente nos hemos referido al disfemismo como «lenguaje sancionado», «tabú» y «desviación de lo correcto». Timothy Jay (2009: 154) afirma que los tabús son algo aprendido a través de la socialización y forman parte de la cultura y el folklore de cada comunidad, por lo que no existe una estandarización del lenguaje ofensivo (Jay 2009: 154). A pesar de las diferencias culturales, las categorías de las que proceden dichos conceptos son, a grandes rasgos, muy similares en todas las culturas occidentales: lo sexual, lo religioso, lo escatológico, el mundo animal, la etnia o las diferencias raciales y las enfermedades físicas y psíquicas. No obstante, el grado de ofensividad atribuido a un campo léxico o término concretos varía mucho dependiendo de dónde nos encontremos.

      Si nos atenemos específicamente a la lengua alemana, existe una sorprendente cantidad de obras dedicadas a su vocabulario malsonante (Dundes 1985; Burgen 1998; Nübling y Vogel 2004; Gauger 2012; Meinunger 2018). Todos ellos coinciden en resaltar un aspecto muy característico del alemán que lo diferencia de otras lenguas europeas (lo que Gauger denomina deutschprachiger Sonderfall): la predominancia del campo léxico de lo escatológico y excremental frente a la extendida preferencia por el campo de lo sexual en el resto de países.

      Mediante un análisis del folklore y las tradiciones alemanas, Dundes concluye, de forma un tanto radical, que la presencia de este lenguaje formaparte del “carácter nacional” de los alemanes (Dundes 1985: 92) y es una “reacción” contra las estrictas reglas de limpieza impuestas en este país (Dundes 1985: 79). Nübling y Vogel (2004: 19) critican la rotundidad estas afirmaciones por no tener en cuenta las posibles similitudes con las tradiciones e historia de otros países y llevan a cabo uno de los primeros


      estudios contrastivos acerca de este tema. Observan, junto al léxico anal, una frecuente recurrencia al léxico animal en relación con lo escatológico (Nübling y Vogel 2004: 23). Respecto a esto, Gauger (2012: 53) comenta que el cerdo es el paradigma de lo excremental y un potenciador de la carga negativa. Siguiendo esta línea, Nübling y Vogel (2004: 23) señalan la importancia de la palabra Scheiße como prefijo intensificador para la creación de nuevos disfemismos, tanto sustantivos (Scheißwetter) como adjetivos (Scheißteuer). Gauger (2012: 53) menciona la posibilidad de sustitución de este prefijo por Schwein- o Sau-, sin que se modifique el significado de la palabra. Estos usos aparecen muy bien reflejados en la película:


      TO

      TM

      Na, die ist schweinereich.

      Esa está podrida de pasta.

      Ich hab dein Scheißprofil gesehen.

      Vi tu mierda de perfil.

      He visto tu puto perfil.


      El TM, especialmente el subtitulado, refleja cómo en español la intensificación se consigue casi siempre mediante adjetivos relacionados con el campo léxico predominante en nuestra lengua: el sexual. El término puta/o goza de una innegable presencia como intensificador y, según Burgen (1998: 88), equivaldría al fucking inglés y al verdammt o Scheiß- alemanes.

      Nübling y Vogel (2004: 24) señalan también el papel de la palabra Arsch

      en alemán a la hora de formar nuevos disfemismos y fraseología escatológica:


      TO

      TM

      Hey, verarscht du mich?

      Ey, ¿qué pasa, estás de coña?

      ¿Me estás vacilando?

      […] bis sie Alkoholiker werden und sie jedem grenzdebilen

      Rich Kid das Abitur in den Arsch pusten. Toll!

      […] hasta empujarlos al alcoholismo y los obliguen a regalarle la selectividad a

      […] hasta que se hagan alcohólicos ¡y les metan la prueba por el culo a todos


      cualquier niñato rico. ¡Una alegría!

      los niñatos ricos retrasados

      ¡Es genial!

      Leck mich am Arsch.

      No me jodas


      Tenemos de nuevo una predominancia de lo sexual (de coña, no me jodas) sobre lo anal en la traducción al español, pues la palabra “culo”, si bien


      recurrente en español, tiene más que ver con lo sexual que con lo escatológico. En cuanto a otros campos, Nübling y Vogel hacen referencia al léxico religioso, relegado a un segundo puesto en alemán, debido, presuntamente, a una creciente secularización (2004: 25). En la película tenemos solamente el ejemplo del intensificador verdammt, usado en dos ocasiones, sustituido en el TM por léxico sexual:


      TO

      TM

      Verdammte Kanaken. Scheiße. Ah!

      Moros de mierda. Joder. ¡Ah!

      Putos moros de mierda. Joder.

      Was machst du, verdammte Scheiße? Fuck.

      ¿Pero qué coño estás haciendo, joder?

      ¡Joder, tío!

      Las mismas autoras sostienen que las referencias sexuales en el alemán tienen una presencia prácticamente insignificante (Nübling y Vogel 2004: 25). Estudios más recientes (Gauger 2012; Brandstetter 2016) han demostrado que esta última afirmación no es cierta y lo mismo podemos observar en Isi & Ossi. Gauger (2012: 146) menciona dos desviaciones de dicha premisa, una espacial, el suroeste de Alemania, donde palabras sexuales como Fotze, Seckel y todos sus derivados parecen estar mucho más extendidas, supuestamente por un contacto cercano con lenguas como el francés o el italiano; y otra generacional, el lenguaje juvenil, en el cual las referencias sexuales tienen cada vez mayor arraigo. En la película nos encontramos con ambas desviaciones, ya que la historia se desarrolla en dos ciudades del suroeste alemán (Heidelberg y Mannheim) y está protagonizada por jóvenes:


      TO

      TM

      Fotze!

      Ai yo! Fotz!2

      ¡Joder!

      ¡Si señor! ¡Joder!

      ¡Joder!

      ¡Cabrón!


      2 El entrenador de boxeo de Ossi habla Kurpfälzisch, el dialecto propio de la zona de Mannheim y otras ciudades al sur de Renania-Palatinado.


      Indicación inconfundible de este lenguaje sexual juvenil es la casi omnipresencia del verbo ficken y derivados, tanto en su sentido literal como figurado, así como de su equivalente inglés fuck:


      TO

      TM

      Na, Weber, heute schon gekackt? Oder wie du's nennst: ficken rückwärts?

      Qué, Weber, ¿ya has cagado hoy? O como tú dices: ¿follado por detrás?

      Bueno, Weber, ¿has cagado hoy? O como a ti te gusta llamarlo, ¿has

      follado al revés?

      Ich brauche einfach diesen verfickten Kampf, Mann.

      Necesito ese puto combate, tío, en serio

      Necesito ese combate, tío.

      Fuck, Mann! Fuck!

      ¡Su puta madre! ¡Joder!

      ¡Mierda, tío! ¡Joder!


      Entre las teorías más plausibles, Gauger menciona la influencia del inglés (proveniente, sobre todo, del mundo digital y los medios audiovisuales, como las redes sociales). Brandstetter (2016: 36) ratifica esta idea con la afirmación de que estas plataformas de entretenimiento impregnan de nuevo léxico el habla juvenil. Havryliv (2011: 122) sostiene, como explicación al uso de internacionalismos, que cuesta menos esfuerzo emitir palabrotas cuando son en una lengua extranjera. Además de este vulgarismo y sus derivados, hemos detectado la presencia en el lenguaje juvenil de otros extranjerismos:


      TO

      TM

      Alle Millionäre sind Illuminaten, Bitch!

      Todos los millonarios sois Illuminati, ¿vale?

      Todos los millonarios sois Illuminati.


      Como demuestran las traducciones, el léxico disfemístico español no se caracteriza por la presencia de voces extranjeras, seguramente, como sostiene Díaz (2012: 400), porque nuestras palabras se perciben más fuertes o violentas y son entendidas por todos los receptores, mientras que el extranjerismo se percibe en ocasiones como un eufemismo.

      En relación con esta influencia extranjera, Havryliv (2011: 122) habla también del creciente uso entre los jóvenes de formas antaño impropias del alemán, especialmente los insultos a la familia y a la madre, que sí son


      frecuentes en otras culturas con las que el alemán convive dentro de sus fronteras, como el turco, el árabe, el serbio, el italiano o el español. Si bien en alemán existe el insulto Hurensohn, no hemos registrado su presencia en la película, mientras que hijo/a de puta y derivados aparecen en varias ocasiones en la traducción para el doblaje de la película:


      TO

      TM

      Einfach so, der will halt nimmer, des Arschloch.

      Es lo que hay, el tío pasa de ti, el hijoputa.

      Fick dich, Mann! Du hast denen Geld gegeben, damit sie abspringen.

      ¡Hija de puta! ¿Le has dado el dinero para que se retire?

      Der kann Gedanke lesen, dieses Arschloch!

      Dejar que te pille el hijoputa.


      Gauger ya lo decía: «wir (Deutsche) beschimpfen direkt und individuell denjenigen, den wir meinen» (2012: 253). No obstante, en contextos de anticortesía, como el que hemos visto en el ejemplo de la batalla de rap, no es raro escuchar en alemán provocaciones o juegos de palabras que mencionan a la madre u otros miembros de la familia.

      Por último, Meinunger (2018: 114) reconoce otros campos que Nübling y Vogel no mencionan y que tienen mucha presencia tanto en alemán como en español. Por un lado, tenemos el reino animal, dejando a un lado Schwein y derivados, que como ya hemos visto van ligados a lo escatológico:


      TO

      TM

      Und ihr könnt wieder

      heimwaggle. Ihr Schlangn.

      ¿Queréis hacer el favor de

      parar? Os voy a echar a la calle.

      ¡Parad ya! ¡Idos a casa!

      ¡Zorras estúpidas!


      En segundo lugar, menciona el ámbito de las discapacidades físicas y psíquicas, estas últimas especialmente presentes en la película:


      TO

      TM

      Komm, du Mongo. Komm hoch. Ah, jawohl. Hier. Spast.

      Vamos, burro. Levanta.

      Venga, hay que ser tonto. Arriba

      Venga, imbécil.

      Levántate. Así. Gilipollas.


      Por último, estarían los insultos racistas, de los cuales tenemos también numerosas muestras en el TO, como ya se ha reflejado hasta ahora con términos como Kanake, traducido como moro. En esta categoría de disfemismos se aprecia una diferencia con respecto a la minoría a la que van dirigidos en cada idioma, que suelen ser las nacionalidades de las que hay un mayor número de inmigrantes en el país en cuestión (países de Oriente Próximo en Alemania y argelinos y marroquíes en España).

      Un campo que no se ha mencionado y que hemos ido viendo en varios de los extractos de la película es el de la orientación sexual y, concretamente, la homosexualidad. Varios autores (Burgen 1998; Gauger 2012) lo han considerado parte del campo de lo sexual. Sin embargo, en nuestro análisis hemos preferido reconocerlo como categoría separada, ya que el léxico empleado no tiene relación con este campo ni encaja en ningún otro (Schwuchtel / maricón).

      A pesar de que el TO objeto de este estudio ha demostrado la creciente frecuencia con la que el léxico sexual protagoniza los actos de habla descorteses, especialmente de las nuevas generaciones, lo cierto es que la tradicional predominancia de lo escatológico sigue siendo un hecho. El porqué de esta predilección no está claro y se han barajado diversas teorías. Gauger reconoce tres posibles motivos (2012: 291-293): primero, que lo sexual no sea un tabú tan fuerte para los alemanes como lo excremental; segundo, que lo sexual sea un tabú tan fuerte que no se rompa ni en una situación de confianza; por último, que el alemán simplemente no avance hacia lo sexual y se quede, por así decirlo, atascado en lo "pre-sexual" (lo excremental). Gauger (2012: 261) defiende que en alemán se recurre a lo negativo para designar lo negativo («wir bezeichnen ‹Scheiße› mit Scheiße»). Frente a los hispanohablantes, que convierten algo intrínsecamente positivo, como lo sexual, en una metáfora de lo negativo. Dos de los disfemismos más utilizadosen la traducción de la película son el verbo joder y el sustantivo coño, lo que confirmaría esta predominancia del componente sexual en nuestra lengua:


      TO

      TM

      Scheiße

      Hay que joderse.

      Joder


      Ist mir scheißegal!

      ¿Y a mi qué coño me

      importa?

      Me la suda.

      Was soll die Scheiße?

      ¿Eso qué coño es?

      ¿De qué coño van?

      Resulta interesante la negatividad con la que normalmente están asociadas las palabras referentes al órgano femenino. Gauger (2012: 239) habla en este sentido de un “mundo de hombres” (eine Männerwelt), sobre todo en lo que se refiere a lo sexual, dominado por la fantasía masculina.

      El vocabulario escatológico tan recurrente en alemán no falta, sin embargo, en español, si bien aparece normalmente en conexión con elementos sexuales o incluso religiosos (me cago en Dios), por lo que pierde en gran medida su connotación excremental. En el doblaje de la película tenemos un par de ejemplos de esta conexión sexual-anal:


      TO

      TM

      Die ist wieder da. Ach du meine Scheiße.

      Ahora si que ya a tomar por culo.

      […] Hier, zack, weg damit…

      Fuera, a tomar por culo.

      No obstante, hemos realizado un hallazgo curioso con respecto a esto durante el análisis, y es que el disfemismo mierda es, contra todo pronóstico, el más numeroso en las versiones traducidas al español. Burgen (1998: 239) mencionaba que, incluso en las lenguas en las que lo escatológico no predomina, los excrementos siempre son un elemento que se nos viene rápido a la mente a la hora de maldecir. Lo vemos reflejado en las muestras extraídas de la película, donde mierda aparece en 20 ocasiones. En un análisis más amplio habría que separar los usos naturales e idiomáticos de este disfemismo de las traducciones literales que no quieren separarse demasiado del original alemán y por ello mantienen el término.

      Para finalizar este apartado, nos gustaría señalar la existencia de un subcampo dentro de lo sexual que goza de popularidad en alemán y no en español: la masturbación. El término Wichser aparece en siete ocasiones en la película y en ninguna de las traducciones se ha utilizado un equivalente en español, sino que se ha sustituido por otro insulto o se ha omitido:


      TO

      TM

      Übrigens, der PR-Wichser, der fand mein Video echt geil.

      Por cierto, al relaciones

      públicas ese le ha encantado el video.

      Por cierto, ese agente dice que mi vídeo mola.

      Du hast das Video hochgeladen, du Wichser!

      ¡Tú subiste ese video, cabronazo!

      ¡Publicaste el vídeo, gilipollas!


      Aunque en español tenemos un equivalente (pajero), se ha optado en la traducción por el uso de disfemismos más idiomáticos que han conferido al TM una mayor naturalidad.

      Por último, sería también interesante, como punto de partida para nuevas investigaciones sobre el tema, analizar como la presencia o ausencia de este lenguaje en el habla alemana depende mucho de la influencia del entorno y el sociolecto al que pertenezcan los interlocutores. Un ejemplo perfecto serían los padres de Isi. La madre no profiere ni una palabra malsonante en toda la película, mientras que el padre utiliza el disfemismo en una única ocasión, pero acompañado de un bitte para suavizar la agresividadde su interpelación:


      TO

      TM

      Mach mal bitte den Scheiß aus.

      Apaga esa mierda, anda.

      Apaga esa mierda.

  3. La traducción de la descortesía en Isi & Ossi

Las diferencias léxicas entre ambas lenguas se reflejan, por lo general, en el TM, como hemos visto a través de los ejemplos seleccionados. El análisis traductológico realizado (véase Anexo) nos ha permitido observar cómo de fieles son las dos versiones en español con respecto a la carga ofensiva del TO y cuáles son las técnicas que se han empleado. Los traductores a cargo de ambas versiones han sido Diego Parra González (doblaje) y Pilar Hernández (subtitulado).

De sus traducciones hemos podido concluir que, en la versión en español, la carga ofensiva tiende a mantenerse o incluso intensificarse, especialmente en el doblaje, donde el traductor tiene mayor libertad de espacio para dejar o añadir los elementos que considere necesarios. Las técnicas más empleadas para mantener la ofensividad han sido a) la sustitución, que consiste en reemplazar un disfemismo por otro no


equivalente, pero sí similar, en el TM (Ávila-Cabrera 2015: 13); b) la reformulación o paráfrasis del original para expresar el TO de forma idiomática y acercarlo a la cultura meta (Ávila-Cabrera 2015: 14); y c) la modulación o cambio en el punto de vista, el foco o la categoría cognitiva en relación con el TO (Molina y Hurtado Albir 2002: 501). Veamos algún ejemplo:

  1. Sustitución:


    TO

    Doblaje

    Selbst Schuld, du Spast

    Tú solo, por gilipollas


  2. Reformulación:


    TO

    Doblaje

    Ich fick so was

    Paso de esa mierda

  3. Modulación:


TO

Doblaje

Machen sie die Flaschen nur halb voll, die Arschlöcher?

¿Qué se han creído? ¿Qué pueden darnos las botellas medio vacías los cabrones?


Hemos mencionado también que, en ocasiones, se intensifica la carga ofensiva. Para ello, se ha utilizado la técnica de la ampliación, definida como la introducción de información que no aparece en el TO (Molina y Hurtado Albir 2002: 510). En español, este énfasis añadido se suele conseguir mediante el uso del intensificador puto/a:


TO

Doblaje

Hey, sag mal. Was is' dat denn für 'ne Scheiße?

Pero bueno, ¿qué puta mierda es esta?


Aunque la mayoría de ampliaciones las podemos ver en el doblaje, debido a la mayor libertad de espacio, las restricciones del subtitulado no impiden la intensificación mediante la adición de nuevos disfemismos,


especialmente cuando se trata de insultos racistas: putos moros, putos moros de mierda, etc. Una posible explicación es el intento de compensación del tono despectivo que se puede percibir en la versión doblada pero se pierde en el subtítulo.

En aquellos casos en los que la carga ofensiva se ha neutralizado, suavizado u omitido, algo que vemos con mayor frecuencia en el subtitulado, se ha recurrido a la sustitución por un término neutral (Klugscheißer por listillo), a la compresión de elementos lingüísticos (Du hältst jetzt sofort die Fresse! por ¡Cállate la boca!) o, directamente, a la omisión (Ich brauche einfach diesen verfickten Kampf, Mann por Necesito ese combate, tío). Hemos encontrado también ejemplos donde la omisión se ha empleado para el doblaje (véase Anexo) como, por ejemplo, cuando se hace referencia al campo de la masturbación, que como hemos dicho no es común en español.

Por último, cabe destacar que, tanto en el doblaje como en el subtitulado, se hace uso de la adaptación, definida por Molina y Hurtado Albir (2002: 509) como el reemplazo de un elemento de la cultura de origen por otro de la lengua meta. El empleo de esta técnica es necesario en aquellos momentos en los que se menciona despectivamente a una minoría étnica. Así, el término despectivo Kanake (referente a personas proveniente de países de Oriente Próximo) se acerca al público español, más familiarizado con inmigrantes marroquíes y argelinos, mediante la denominación moro.

Siguiendo lo anteriormente expuesto y teniendo en cuenta todos los datos de nuestra tabla (véase Anexo), podemos concluir que la versión para subtitulado contiene un mayor número de omisiones, principalmente debido a las constricciones espacio-temporales que han obligado a recortar la información no indispensable. En la versión para doblaje, sin embargo, nos encontramos con que los actos de habla originales se han podido mantener en la mayoría de los casos. Este hecho, sin embargo, no la convierte en una mejor traducción, pues en ocasiones presenta una fidelidad excesiva con el original y tiende a la literalidad. La versión de Parra llega incluso a presentar errores de traducción (véase, por ejemplo, el doblaje en el min. 15:03). La propuesta de Hernández, por otro lado, ha sabido superar las barreras del subtítulo y transmitir el sentido del original de manera más idiomática, demostrando que, aunque lo ideal sería poder trasladar al español la misma carga ofensiva que en alemán, no es estrictamente necesario mantener los mismos significantes para crear una traducción equivalente donde no se pierda el


sentido del original. Debido a su mayor idiomaticidad, el subtítulo ha resultado más útil para el análisis, pues se acerca más a un uso real de la lengua meta y permite establecer mejor los contrastes con el alemán, especialmente en el nivel léxico, donde podemos ver más claramente la dicotomía escatólogico-sexual.

Conclusiones

El análisis de la película escogida nos ha permitido observar de cerca cómo se manifiestan los actos de habla descorteses en alemán y en español y cuáles son las principales diferencias entre ambas lenguas.

Desde un punto de vista pragmático, hemos visto que la fuerza ilocutiva de los actos de habla descorteses se ha mantenido en la mayoría de los casos, especialmente en el doblaje, si bien en el subtitulado vemos una mayor neutralización u omisión de la carga ofensiva, presumiblemente a causa de las constricciones espacio-temporales. De esto se puede deducir que en español, al menos en la traducción de Isi & Ossi, no se aprecia una tendencia a la censura del lenguaje tabú.

En cuanto al léxico, el análisis ha servido para confirmar las dos premisas expuestas anteriormente: en primer lugar, que en alemán predomina el campo de lo escatológico y lo anal frente a la preferencia por el léxico sexual en español y, en segundo lugar, que existe un incremento en el uso del vocabulario obsceno relacionado con lo sexual entre los jóvenes alemanes, especialmente si tenemos también en cuenta el contexto espacial en el que se desarrolla la trama (suroeste de Alemania) y el fenómeno de la anticortesía o insulto ritual en contextos juveniles en los que se intenta construir o mantener una identidad de grupo. La representación perfecta de ello son el personaje de Ossi y, especialmente, su abuelo, influido tanto por el ambiente marginal de la cárcel como por la cultura suburbana de la batalla de rap.

Estos contrastes se han podido ver muy bien reflejados en las dos traducciones de la película, si bien, como hemos comentado previamente, la versión para subtitulado ha sido de mayor ayuda a la hora de registrar las diferencias en el léxico, ya que en el doblaje se aprecia una mayor tendencia a mantener las unidades del TO y/o acercarse a este lo máximo posible.

A pesar de haber cumplido con el objetivo principal de este trabajo, hemos de tener en cuenta las limitaciones de nuestro estudio a la hora de


determinar la naturaleza de las diferencias en los actos de habla descorteses. Aunque el texto escogido para el análisis nos ha proporcionado una visión general de los contrastes, no podemos olvidar que las versiones en español son una traducción y que esta, aunque busca ser lo más idiomática posible, no es del todo equiparable a lo que sería la lengua natural. Sería interesante para un estudio más profundo tomar alguna otra muestra en la que el español sea la lengua origen y el alemán, la lengua meta.


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Anexo: Tabla con el texto origen y las traducciones para doblaje y subtitulado

Debido a las limitaciones espaciales estipuladas en las directrices de publicación a las cuales se ajusta este trabajo, nos gustaría incluir, a modo de Anexo, la tabla elaborada tras el visionado de la película en VO y sus dos versiones traducidas.

Se han encontrado en total 145 actos de habla descorteses, marcados en negrita y con el minutaje exacto, de los cuales se ha puntualizado el campo léxico, la estrategia de traducción utilizada en cada caso y el resultado, es decir, si se ha mantenido, suavizado, neutralizado u omitido la carga ofensiva.

A continuación, adjuntamos la tabla completa


Minuto

Versión original (DE)

Acto de habla

Doblaje (ES)

Subtitulado (ES)

Campo léxico

Estrategia de traducción

Carga ofensiva

1'20''

Ist mir scheißegal!

aggresive Aufforderung / interpelación agresiva

¿Y a mi qué coño me importa?

Me la suda.

DE: escatológico ES (doblaje): sexual

ES (subt.): escatológico- sexual

Dobl.: modulación Subt.: sustitución

Se mantiene

1'24''

Oscar. Keiner mag

Klugscheißer.

Beschimpfung / insulto

Oscar, a nadie le

gustan los listillos.

Oscar, los listillos no

caen bien.

DE: escatológico

ES: -

Sustitución

Se neutraliza

1'39''

Die blöde Fotze.

Beschimpfung / insulto

La muy zorra.

La muy zorra.

DE: sexual

ES (doblaje y subt.): animal

Sustitución

Se suaviza

1'50''

Scheiße! Hast du eine Tüte?

Fluch / maldición

¡Mierda! ¿Tienes una bolsa?

¡Mierda! ¿Tienes una bolsa?

DE: escatológico

ES (dobl. Y subt.): escatológico

Traducción literal

Se mantiene

1'56''

Hey, halt die Fresse!

agressive Aufforderung /

interpelación agresiva

¡Cierra el pico!

¡Cállate!

DE: animal

ES (dobl.): animal

ES (subt.): -

Dobl.: sustitución Subt.: explicitación

Dobl.: se suaviza Subt.: se neutraliza

2'11''

Verdammte Kanaken. Scheiße. Ah!

Beschimpfung mit

Verunglimpfung + Fluch / insulto denigrante + maldición

Moros de mierda. Joder.

¡Ah!

Putos moros de mierda. Joder.

DE: religioso/étnico/ escatológico

ES: étnico/escatológico/ sexual

Dobl.: sustitución Subt.: sustitución +ampliación

Dobl.: se mantiene Subt.: se intensifica

3'30''

Hey, Langer, was'n Oscar für'n Kack- Name?

Abwertende rituelle Bemerkung /

observación peyorativa anticortés

Oye tío, ¿qué mierda de nombre esOscar?

Oye, larguirucho. ¿Qué mierda de nombre es Oscar?

DE: escatológico

ES (dobl. Y subt.): escatológico

Sustitución

Se intensifica


3'44''

Widersprich deine Chefin nicht, wenn sie versucht, cool zu sein,

du Arsch!

Rituelle Beschimpfung / insulto anticortés

No le repliques a la jefa cuando intenta ir de colega, idiota.

No contestes a tu jefa cuando intenta ser guay, imbécil.

DE: escatológico

ES (dobl. Y subt.): capacidades intelectuales

Sustitución

Se suaviza

7'23''

Man braucht einfach reiche Eltern, gute Anwälte, die den Lehrern das Leben zur Hölle machen, bis sie Alkoholiker werden und sie jedem grenzdebilen Rich Kid das Abitur in den Arsch pusten. Toll!

Beschimpfung (Verunglimpfung)

Solo hace falta tener unos padres ricos y buenos abogados que les amarguen la vida a los profesores hasta empujarlos al alcoholismo y los obliguen a regalarle la selectividad a cualquier niñato rico.

¡Una alegría!

Solo necesitas unos padres ricos, buenos abogados, hacerles la vida imposible a tus profesores hasta que se hagan alcohólicos ¡y les metan la prueba por el culo a todos los niñatos ricos retrasados

¡Es genial!

DE: escatológico/capacidades intelectuales

ES (dobl. y subt.): escatológico/capacidades intelectuales

Dobl.: omisión Subt.: reformulación

Dobl.: se omite Subt.: se mantiene

7'36''

Schon wieder teurer geworden, dieScheiße.

abwertende Bemerkung / observación

peyorativa

Ya ha vuelto a subir,

joder.

Otra vez ha subido de precio.

DE: escatológico ES (dobl.): sexual ES (subt.): -

Dobl.: compensación Subt.: omisión

Dobl.: se mantiene Subt.: se omite

7'48''

Jede Woche wird der Mist teurer. Ich sag´s ja. Demokratie ist scheiße. Ich hab Hitler noch erlebt.

abwertende Bemerkung / observación peyorativa

Cada semana es más cara esta mierda. Créeme, la democracia es un truño. Y eso que viví con Hitler.

Esta mierda cada vez es más cara. La democracia es una mierda.

DE: escatológico

ES (dobl. y subt.): escatológico

Dobl.: trad. literal + sustitución

Subt.: trad. literal

Dobl.: se mantiene/sesuaviza Subt.: se mantiene(x2)


Estudios Franco-Alemanes 16 (2024), 131-159