e-ISSN: 2695-8465
ISSN: 2255-3703
51
Skopos 13 (2022), 51-68
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema
laudatorio dedicado a Katherine Philips por otra mujer, en
el siglo XVII
Ángeles García Calderón
Universidad de Córdoba
id1gacaa@uco.es
Recibido: 23/12/2022
Revisado: 27/01/2023
Aceptado: 07/02/2023
Resumen: Autora de gran importancia en la poesía inglesa del siglo XVII, Katherine
Philips atesora, entre otros méritos, el de haber sido alabada por Dryden, y
celebrada por Cowley y Jeremiah Taylor, así como el de haber instaurado en la
literatura inglesa femenina una tradición de escritos virtuosa y moral, reivindicada a
su muerte por otras autoras relevantes. Sin pretender ni buscar nunca halagos ni
privilegios intelectuales durante su corta vida, sería no obstante ensalzada por
escritores y personalidades tan importantes como The Earl of Orrery, The Earl of
Roscomon, Abraham Cowley, James Tyrrell y Thomas Flatman. Además de todas
estas alabanzas, Philips recibiría, como reconocimiento a su labor de escritora y
traductora, un poema anónimo, se supone que escrito por una mujer irlandesa:
“Philo-Philippa”: To the Excellent Orinda. Basado en estas premisas el presente
trabajo se articula en torno a tres ejes: a) la figura de la autora, b) un breve esbozo
de la literatura encomiástica, c) la traducción del poema citado.
Palabras clave: Katherine Philips, poesía inglesa, siglo XVII, género encomiástico o
laudatorio, traducción de poesía.
“Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: a laudatory poem
dedicated to Katherine Philips by another woman, in the 17th
century
Abstract: Katherine Philips, an outstanding English female poet of 17th century, has
the great merit of being praised by Dryden and celebrated by Cowley and Jeremiah
Taylor, as well as of having introduced a tradition of moral writing in English female
literature, vindicated by other relevant female authors after her death. With no
pretence for seeking neither praise nor intelectual privilege during her short life time,
she was, however, praised by relevant writers and persons like the Earl of Orrery, the
Earl of Roscomon, Abraham Cowley, James Tyrrell and Thomas Flatman. Beside all
such words of praise, Philips was devoted, as a recognition for her work as a writer
and translator, an anonymous poem, written, as it appears, by an Irish female poet,
Philo-Philippa”: to the Excellent Orinda. Based on such antecedents, the present
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
52
Skopos 13 (2022), 51-68
paper tackles three main points: a) the female author herself, b) a brief outline of
‘praise literature’, c) the translation of the above cited poem.
Key words: Katherine Philips, English poetry, XVII century, encomiastic or laudatory
genre, translation of poetry.
Sumario: 1. La figura de Katherine Philips en el siglo XVII en Inglaterra. 2. La literatura
encomiástica. 3. Philo-Philippa: to the excellent Orinda. 3.1. La traducción del poema.
1. La figura de Katherine Philips en el siglo XVII en Inglaterra
En una época en la que la mujer se limitaba fundamentalmente a sus
labores de casa y al cuidado de los hijos, ya se pueden encontrar figuras
que se rebelan contra esta “asignación” de papeles a los sexos. En este
terreno, la vida de Katherine Philips, a pesar de ser corta, es una auténtica
reivindicación de lo que ella entiende por su libertad como ser humano,
tanto en el terreno afectivo como en el espiritual de escritora. En el primero
exponiendo claramente sus ideas respecto a la relación humana al fundar
“The Society of Friendships” (1651-1661, círculo semi-literario compuesto en
un principio por mujeres, pero en el que no se excluía a los hombres). Por lo
que respecta a su labor profesional como escritora, sus dotes quedan bien
patentes en la espléndida expresión de sentimientos y afectos que podemos
hallar en sus poemas, siendo asimismo notoria su labor como traductora,
atreviéndose con autores tan “modernos” como Saint-Amant y tan
importantes e influyentes en toda Europa como Pierre Corneille. El conjunto
de su figura y su obra, como poeta y traductora, harán de Katherine Philips
una de las escritoras más notables de su tiempo, posiblemente junto con
Aphra Behn la más conocida de su siglo, sirviendo de modelo a seguir por
las escritoras inglesas del siglo XVIII.
Alabada por Dryden, y celebrada por Cowley y Jeremiah Taylor, ella
jamás pretendió ni buscó halagos ni privilegios intelectuales durante su
corta vida: sus poemas, que habían sido esparcidos entre sus amigos,
fueron impresos sin su consentimiento, y su publicación le causó, según
parece, un estado febril que contribuyó a llevársela a la tumba en la flor de
la edad
.
Resumiendo la importancia de su figura, la conocida como "The
Matchless Orinda" fue una dama que gozó de fama de gran poetisa en su
época, reuniendo en su entorno a algunos de los mejores y más
distinguidos hombres del período de la Restauración; su poesía fue leída y
Otras opiniones se inclinan por creer que murió de viruela.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
53
Skopos 13 (2022), 51-68
admirada hasta bien entrado el siglo XVIII, aunque actualmente se la
recuerde porque Dryden la mencionaría en su oda a la señora Anne
Killigrew, o, sobre todo, porque Keats la elogiaría en una carta a su amigo
Reynolds. Sin embargo, es innegable su fuerte individualidad y su agudo
ingenio, siendo la primera mujer inglesa que se hizo un nombre en la
poesía.
Tras su muerte, y en las siguientes décadas, numerosas escritoras no
solo poetisas, sino también novelistas y ensayistas de la Isla, reivindicarían
su pertenencia a la tradición virtuosa y moral de Katherine Philips, línea en
la que pueden inscribirse Anne Killigrew, Anne Finch, Mary Lee Chudleigh,
Mary Astell, Jane Baker, Elisabeth Singer Rowe y Mary Masters.
Así pues, la importancia de Katherine Philips en la literatura inglesa
no es menor, más aún si pensamos en la repercusión que su figura literaria
tendría en los escritos femeninos en lengua inglesa. Como bien se afirma en
la primera edición, y traducción, al español de su obra poética:
Con la aparición de escritoras como Philips y Aphra Behn las mujeres
empiezan a ser consideradas como importantes en su profesión y no
como simple advenedizas en un mundo de hombres; a pesar de sus
caracteres y aptitudes tan distintas ante la sociedad las dos autoras
llegan a imponer, por distintos caminos, sus escritos convirtiéndolos en
algo apreciado y valorado por el sexo opuesto basado en los ejes que
podríamos denominar “gender”, “class” y “literary production”
.
2. La literatura encomiástica
El género encomiástico, fue cultivado ya desde Publio Papinio Estacio
(45-96), Claudio Claudiano (ca. 370-ca. 405), o el obispo de Arvernia
Sidonio Apolinar (430-479)
. De él contamos en lengua española buenos
ejemplos, como los espléndidos 632 versos del Panegírico al Duque de
Lerma (1617) de Góngora, autor que revitalizaría algunos años más tarde
las imitaciones entre los escritores del XVII
.
Katherine Philips: Obra poética. Edición bilingüe de Ángeles García Calderón y Juan de Dios Torralbo
Caballero. Madrid: Ediciones Cátedra (Letras Universales), 2020, p. 11.
Ya Aristóteles en el libro I de la Rétorica divise el campo oratorio en tres géneros: el deliberativo
(político), el judicial y el epidíctico (también denominado demostrativo o encomiástico, que celebra a un
personaje por medio del elogio, o denigrando a sus detractores).
La literatura encomiástica sigue despertando un gran interés en nuestros días, como puede deducirse
por la atención que le prestan los investigadores; cito solo dos ejemplos: Luciana Gentilli y Renata
Londero (eds.). Sátira y encomiástica en las artes y letras del siglo xvii español. Madrid, Visor, 2017; y
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
54
Skopos 13 (2022), 51-68
En la Islas Británicas, tras John Donne, que cultivaría en ocasiones
este tipo de poesía, es curioso constatar cómo son dos mujeres quienes
recibirán elogios de sus colegas escritores. Prácticamente coetáneas, tanto
Katherine Philips (1632-1664) como Aphra Behn (1640-1689), poetisas
citadas por la crítica para poner de relieve sus diferencias, las dos recibirán
poemas elogiosos de otros escritores, que podrían concretarse en 7
poemas dedicados a la primera, y 26 poemas a la segunda
, aunque la
relevancia de los alusivos a Katherine Philips venga marcada por la
importancia de los nombres de sus autores: The Earl of Orrery
, The Earl of
Roscomon
, Abraham Cowley
, James Tyrrell
, Thomas Flatman
y el
poema anónimo “Philo-Philippa”: To the Excellent Orinda, del que me
ocuparé en este trabajo.
3.Philo-Philippa”: to the excellent Orinda
Con ocasión de la representación en Dublín de Pompey, en 1663,
Katherine recibiría un poema anónimo dedicado a ella, parece ser que
escrito por una mujer irlandesa como señal de alabanza y admiración. El
texto, titulado “Philo-Philippa”: To the Excellent Orinda, se incluiría
posteriormente en la edición autorizada y póstuma de los Poems de Philips
(1667) y sus sucesivas reediciones.
Las opiniones más fiables afirman que el poema fue escrito en 1663
por una mujer irlandesa. Según una carta de nuestra autora a Sir Charles
Cotterell (“Poliarchus”), del 8 de abril de 1663, el poema fue uno de los
El panegírico en el Siglo de Oro: nuevas investigaciones. Criticón, nº 132, 2018. (Monográfico dedicado
a la escritura encomiástica).
Una relación detallada de estos se encuentra en la Tesis Doctoral de Balbina Prior Barbarroja: Aphra
Behn y las esferas del deseo: inicio de la poesía de género, dirigida por el profesor Juan de Dios
Torralbo Caballero y defendida en la Universidad de Córdoba en 2016.
Roger Boyle (1621-1679), primer conde de Orrery, militar británico, hombre de estado y dramaturgo.
Boyle luchó durante las guerras confederadas irlandesas, antecedente de las guerras de los tres
reinos.
Título importante de la nobleza irlandesa, creado en 1622 por James Dillon y muy vinculado a
escritores y políticos.
Famoso poeta metafísico que dedicaría dos poemas a nuestra autora.
Importante personaje de la época que se convertiría en el campeón de las ideas liberales de su
tiempo.
Conocido poeta inglés, que destacaría por sus convicciones realistas.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
55
Skopos 13 (2022), 51-68
muchos homenajes de reconocimiento enviado a la poetisa después de su
traducción de Corneille La Mort de Pompée, representada en el Theatre
Royal, Smock Alley, de Dublín, el 10 de febrero de 1663. Katherine se
refiere a la anónima redactora del poema como una persona desconocida
“who pretends to be a Woman, and writes very well”.
Veamos el poema y su traducción al español:
“PHILO-PHILIPPA”: TO THE EXCELLENT ORINDA
Let the Male Poets their Male Phœbus chuse,
Thee I invoke, Orinda, for my Muse;
He could but force a Branch, Daphne her Tree
Most freely offers to her Sex and thee,
And says to Verse, so unconstrain'd as yours,
Her Laurel freely comes, your fame secures:
And men no longer shall with ravished Bays
Crown their forcd Poems by as forc'd a praise.
Thou glory of our Sex, envy of men,
Who are both pleas'd and vex'd with thy bright Pen: 10
Its lustre doth intice their eyes to gaze,
But mens sore eyes cannot endure its rays;
It dazles and surprizes so with light,
To find a noon where they expected night:
A Woman translate Pompey! which the fam’d
Corneille with such art and labour fram'd!
To whose close version the Wits club their sense
And a new Lay poetick SMEC springs thence!
Yes, that bold work a Woman dares Translate,
Not to provoke, nor yet to fear mens hate. 20
Nature doth find that she hath err'd too long,
And now resolves to recompence that wrong:
Phœbus to Cynthia must his beams resigne,
The rule of Day and Wit's now Feminine.
That Sex, which heretofore was not allow'd
To understand more than a beads, or crowd;
Of which Problems were made, whether or no
Women had Souls; but to be damn'd, if so;
Whose highest Contemplation could not pass,
In mens esteem, no higher than the Glass; 30
And all the painful Labours of their Brain,
Was only how to Dress and Entertain:
Or, if they ventured to speak sense, the wife
Made that, and speaking Oxe, like Prodigies.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
56
Skopos 13 (2022), 51-68
From these thy more than masculine Pen hath rear'd
Our Sex; first to be prais'd, next to be feard.
And by that same Pen forc'd, men now confess,
To keep their greatness, was to make us less.
Men know of how refin'd and rich a mould
Our Sex is fram'd, what Sun is in our Gold: 40
They know in Lead no Diamonds are set,
And Jewels only fill the Cabinet.
Our Spirits purer far than theirs, they see;
By which even Men from Men distinguish'd be;
By which the Soul is judg'd, and does appear
Fit or unfit for action, as they are.
When in an Organ various sounds do stroak,
Or grate the Ear, as Birds sing, or Toads croak;
The Breath that voices every Pipe's the fame,
But the bad mettal doth the Sound defame. 50
So, if our Souls by sweeter Organs speak,
And theirs with harsh false notes the air do break;
The Soul's the same, alike in both doth dwell,
’Tis from her Instruments that we excel.
Ask me not then, why jealous men debar
Our Sex from Books in Peace, from Arms in War;
It is because our Parts will soon demand
Tribunals for our Persons, and Command.
Shall it be our Reproach, that we are weak,
And cannot fight, nor as the School-men speak? 60
Even Men themselves are neither strong nor wife,
If Limbs and Parts they do not exercise.
Train'd up to Arms, we Amazons have been,
And Spartan Virgins strong as Spartan Men:
Breed Women but as Men, and they are these;
Whilst Sybarit Men are Women by their Ease.
Why shou'd not brave Semiramis break a Lance,
And why shou'd not soft Ninyas curle and dance?
Ovid in vain Bodies with Change did vex,
Changing her form of life, Iphis changed Sex. 70
Nature to Females freely doth impart
That, which the Males usurp, a flout, bold heart.
Thus Hunters female Beast fear to assail:
And female Hawks more mettal’d than the Male:
Men ought not then Courage and Wit engross,
Whilst the Fox lives, the Lyon, or the Horse.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
57
Skopos 13 (2022), 51-68
Much less ought Men both to themselves confine,
Whilst Women, such as you, Orinda, shine.
That noble Friendship brought thee to our Coast,
We thank Lucasia, and thy Courage boast. 80
Death in each Wave cou'd not Orinda fright,
Fearless she acts that Friendship she did write:
Which manly Virtue to their Sex confin'd,
Thou rescues to confirm our softer Mind;
For there's requir'd (to do that Virtue right)
Courage, as much in Friendship as in Fight.
The Dangers we despise, doth this Truth prove,
Tho' boldly we not fight, we boldly love.
Ingage us unto Books, Sappho comes forth,
Tho' not of Hesiod's Age, of Hesiod's Worth. 90
If Souls no Sexes have, as 'tis confess’d,
’Tis not the He nor She makes Poems best:
Nor can Men call these Verses Feminine,
Be the Sense Vigorous and Masculine.
'Tis true, Apollo fits as Judge of Wit,
But the nine Female learned Troop are it:
Those Laws, for which Numa did wife appear,
Wiser Ægeria whisper'd in his Ear.
The Gracchi’s Mother taught them Eloquence,
From her Breasts Courage flow'd, from her Brain; 100
And the grave Beards, who heard her speak in Rome,
Blush'd not to be instructed, but o'ercome.
Your Speech, as hers, commands Respect from all,
Your very Looks, as hers, Rhetorical:
Something of Grandeur in your Verse Men see,
That they rise up to it as Majesty.
The wise and noble Orrery’s Regard
Was much observ'd, when he your Poem heard:
All said, a fitter Match was never seen,
Had Pompey’s Widow been Arsamnes Queen. 110
Pompey, who greater than himself’s become,
Now in your Poem, than before in Rome;
And much more lasting in the Poets Pen,
Great Princes live, than the proud Towers of Men.
He thanks false Egypt for its Treachery,
Since that his Ruin is so sung by thee;
And so again wou'd perish, if withal,
Orinda wou'd but celebrate his Fall.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
58
Skopos 13 (2022), 51-68
Thus pleasingly the Bee delights to die,
Foreseeing, he in Amber Tomb shall lie. 120
If that all Egypt for to purge its Crime,
Were built into one Pyramid o'er him,
Pompey wou'd lye less stately in that Herse,
Than he doth now, Orinda, in thy Verse:
This makes Cornelia for her Pompey vow,
Her Hand shall plant his Laurel on thy Brow:
So equal in their Merits were both found,
That the fame Wreath Poets and Princes crown'd:
And what on that great Captain's Brow was dead,
She joys to see re-flourished on thy Head. 130
In the French Rock Cornelia first did shine,
But shined not like herself till she was thine:
Poems, like Gems, translated from the Place
Where they first grew, receive another Grace,
Dress'd by thy Hand, and polish'd by thy Pen,
She glitters now a Star, but Jewel then:
No Flaw remains, no Cloud, all now is Light,
Transparent as the Day, bright parts more bright.
Corneille, now made English, so doth thrive,
As Trees transplanted do much lustier live. 140
Thus Oar digg'd forth, and by such Hands as thine
Refin'd and stamp'd, is richer than the Mine.
Liquors from Vessel into Vessel pour'd,
Must lose some Spirits which are scarce restor'd:
But the French wines, in their own Vessel rare,
Pour'd into ours, by thy hand, Spirits are;
So high in Taste, and so delicious,
Before his own Corneille thine wou'd chuse.
He finds himself enlightened here, where Shade
Of dark Expression his own Words had made: 150
That what he wou'd have said, he sees so writ,.
As generously, to just Decorum fit.
When in more Words than his you please to flow,
Like a spread Flood, inriching all below,
To the Advantage of his well-meant Sense,
He gains by you another Excellence.
To render Word for Word, at the old rate,
Is only but to Construe, not Translate:
In your own Fancy free, to his Sense true,
We read Corneille, and Orinda too: 160
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
59
Skopos 13 (2022), 51-68
And yet ye both are so the very fame,
As when two Papers join'd make one bright Flame.
And sure the Copier's Honour is not small,
When Artists doubt which is Original.
But if your fettered Muse thus praised be,
What great things do you write when it is free?
When it is free to chuse both Sense and Words,
Or any Subject the vast World affords?
A gliding Sea of Chrystal doth best show
How smooth, clear, full, and rich your Verse doth flow: 170
Your Words are chosen, cull’d, not by chance writ,
To make the Sense, as Anagrams do hit.
Your rich becoming Words on the Sense wait,
As Maids of Honour on a Queen of State.
’Tis not white Satin makes a Verse more white,
Or soft; Iron is both, write you 0n it.
Your Poems come forth cast, no File you need;
At one brave Heat both shap'd and polished.
But why all these Encomiums of you,
Who either doubts, or will not take as due? 180
Renown how little you regard, or need,
Who, like the Bee, on your own Sweets doth feed?
There are, who like weak Fowl with shouts fall down,
Doz'd with an Army's Acclamation:
Not able to indure Applause, they fall,
Giddy with Praise, their Praises Funeral.
But you, Orinda, are so unconcern'd,
As if when you, another we commend.
Thus, as the Sun, you in your Course shine on,
Unmov'd with all our Admiration: 190
Flying above the Praise you shun, we see
Wit is still higher by Humility.
3.1. La traducción del poema
Por lo que respecta a la traducción del poema, igual que ocurre con
los de la propia Katherine Philips, presenta la dificultad inherente a la poesía
inglesa de ‘encerrar’ en un verso español toda la significación que implica el
verso inglés, ya que la densidad de su pensamiento no posibilita la tarea del
traductor, y a veces es preferible verter la idea completa antes que intentar
ajustarse a un metro único. La opción que he preferido es la de traducir los
versos originales en versos blancos, generalmente alejandrinos sin rima.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
60
Skopos 13 (2022), 51-68
Señalo, por último, que una gran parte de la dificultad del poema se
debe al uso de palabras arcaicas irlandesas.
“PHILO-PHILIPPA”: A LA EXTRAORDINARIA ORINDA
Que los hombres poetas elijan a su Febo:
yo a ti te invoco, Orinda, para que seas mi Musa;
él partir una rama pudo, Dafne su árbol
ofreció libremente a su sexo y a ti,
recita los poemas, sin coerción cual los tuyos,
su laurel surge libre, tu fama asegurada:
los hombres no estarán de laureles cautivos
coronando sus poemas con elogios forzados.
Gloria de nuestro sexo, envidia de los hombres,
que gozan y se irritan con tu brillante pluma: 10
su lustre los incita a fijar su mirada,
mas los ojos del hombre no soportan sus rayos;
de tal manera ciegan y aturden con su luz,
hallando un mediodía do la noche esperaban:
¡una Mujer traduce a Pompeyo
! Que el famoso
Corneille con tanto arte y esfuerzo adaptó!
¡A esa buena versión puso el club “Wit” sentido
y de ahí surgió SMEC
, una nueva poética!
Sí, esa audaz tarea que osa verter una hembra,
no por retar, ni incluso temiendo odio del hombre. 20
Natura encuentra que ella erró por largo tiempo,
y ahora ese error recompensar resuelve:
Apolo rendir debe ahora a Cintia sus rayos
,
la ley del tiempo e ingenio es ahora femenina.
Ese sexo, al que antes no se le permitía
mas que asistir a rezos, y reuniones o bailes;
en ellas las cuestiones eran si las mujeres
Alusión a la tragedia de Pierre Corneille La Mort de Pompée, representada por primera vez en
Francia en 1643, en el “Théâtre du Marais”, y publicada al año siguiente.
SMEC simboliza la abreviación de Smectymnuus”, nombre formado por las iniciales de cinco
polemistas anti episcopales (Stephen Marshal, Edmund Calamy, Thomas Young, Matthew Newcomen y
Willian Spurstows); los cinco publicaron un panfleto anti episcopal (Cf.: The Broadview Anthology of
Seventeenth-Century Verse & Prose. Vol. I: Verse. Edited by Alan Rudrum, Joseph Black & Holly Faith
Nelson, Broadview Press, 2001; Royalist Women Writters 1650-1689, Hero Chalmers. Oxford:
Clarendon Press, 2004).
Es decir, el Sol (símbolo masculino) debe rendirse a la Luna (símbolo femenino).
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
61
Skopos 13 (2022), 51-68
tenían alma o no; si era así, condenarlas;
esas miras tan altas no podían hallar,
en la estima del hombre, más que el de un cristal; 30
y todos los penosos trabajos de sus mentes
se limitaban sólo a agradar y vestirse:
pero si las esposas a hablar con juicio osaban,
era algo prodigioso, cual si un buey hablara.
Por tu pluma, mjor que la del hombre, fuimos
sexo propio; en principio loadas, luego temidas.
Forzó la misma pluma, al hombre a admitir
que mantener su honor era hacernos de menos.
Los hombres saben que un rico y fino molde
enmarca nuestro sexo, qué Sol hay en nuestro Oro
: 40
saben que en el plomo no se engastan diamantes,
y que las joyas sólo rellenan las vitrinas.
Ven nuestras almas más virtuosas que las suyas;
por eso hasta los hombres distínguense unos de otros;
por eso es juzgada el alma, que se muestra
apta o no a la acción, según el resultado.
Cuando varios sonidos se aúnan en un Órgano,
como el trino de un pájaro, o el croar de un sapo;
el hálito propicia la gloria de los tubos,
pero el mal metal degrada el sonido. 50
Así, si nuestras almas hablan por dulces Órganos,
las suyas distorsionan el aire en falsas notas;
las almas son las mismas, y en ambos sexos moran:
es por sus instrumentos por lo que destacamos.
No me preguntes, pues, por qué el celoso impide
que en la paz leamos libros, y usar armas en guerra;
por eso nuestro sexo pronto exigirá
tribunales y fueros propios de las mujeres.
¿Se nos reprochará nuestra debilidad,
que no hablamos, luchamos como los académicos
? 60
Ni los hombres serían más fuertes que sus cónyuges,
si no ejercitaran sus miembros y atributos.
Los antiguos creían que el Sol al moverse alrededor de la Tierra tejía o creaba hilos de oro.
“School-men” es una alusión a los profesores de lógica, metafísica y teología en las universidades
medievales que seguían la división del conocimiento en las siete artes liberales, creadas durante la
época carolingia, divididas en el trivium (gramática, lógica y retórica) y el quadrivium (aritmética,
geografía, astronomía y música).
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
62
Skopos 13 (2022), 51-68
Nosotras, Amazonas, instruidas en las armas,
las castas espartanas fuertes cual espartanos:
criadlas como a hombres, y como ellos serán;
mientras que los de Síbari
, hembras por su molicie.
¿Por qué la audaz Semíramis no usaría la lanza,
y por qué el blando Ninias
no haría curlin
y danza?
Ovidio a cuerpos vanos con cambios afligió,
cambiándoles su vida: a Ifis mudo de sexo
. 70
Natura a las mujeres concede sin reservas
lo que el varón usurpa: un pecho burlón y audaz.
De ahí que los cazadores no ataquen bestias hembras,
y el halcón hembra sea más vivaz que el macho:
no debe ansiar el hombre el valor y el ingenio,
mientras exista el zorro, el león o el caballo.
Y aún menos deberían encerrarse en sí mismos,
mientras que las mujeres, cual tú, Orinda, brillan.
Esa noble Amistad
te trajo a nuestras costas,
a Lucasia
agraciamos, y loamos tu coraje. 80
Síbari (en griego antiguo Σύβαρις, Subaris), era una colonia griega del Sur de Italia, en la actual
Calabria, fundada en el siglo VIII a. J. C. Famosa por su proverbial riqueza, logró cierto esplendor,
siendo famosos sus habitantes, los sibaritas”, por su afición al lujo y la vida reposada; así, el término
en la lengua española ha permanecido como un calificativo referido a alguien refinado. En este caso la
alusión es a su afeminamiento.
Hijo de Semíramis, hombre débil y de poco carácter.
El curlin, adaptación española del término, es un juego que apareció por primera vez en la Baja Edad
Media en Escocia, del que se conserva una piedra a comienzos del siglo XVI (1511). La palabra curling
se encuentra en un documento escrito data de 1620 en Perth, en el prefacio y en los versos de un
poema del poeta e historiador escocés Henry Adamson (15811637). El juego era conocido, en
Escocia y otras regiones pobladas por descendientes escoceses, con el nombre de "the roaring game",
debido al sonido que producen las piedras al deslizarse sobre la pista de adoquines (pebble). La
palabra deriva del verbo escocés curr (producir un pequeño ruido).
En el libro IX de las Metamorfosis, versos 666-797, se narra la historia de Ifis, joven cretense hija de
Ligdo y Teletusa, salvada de la muerte por su madre y una nodriza, que mintieron diciendo que era
niño (Ligdo creía que la Fortuna no le permitía tener una hija mujer y había ordenado su ejecución si
nacía de ese sexo). Cuando llegó a la juventud, Ligdo la comprometió con una muchacha de su misma
edad llamada Yante: las dos se enamoraron instantáneamente. Teletusa pidió ayuda a la diosa egipcia
Isis, la cual transformó a la joven en muchacho, y así pudo casarse con Yante.
El término “Amistad” es de una importancia extrema en casi todos los poemas de K. P., sirviendo
incluso de título, o estando incluido en él, en algunos.
Apelativo de Anne Owen en el círculo íntimo de K. P. y con la que viajó a Irlanda en junio de 1662.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
63
Skopos 13 (2022), 51-68
La muerte en cada ola no asustó a Orinda,
sin miedo ella obra lo que Amistad le dicta:
si virtud varonil confinaba a su sexo,
lo salvas afianzando nuestra mente más débil;
pues se requiere en ello (para ser virtuoso)
valor, ya sea en la lucha, como en la Amistad.
Los riesgos que ignoramos prueban esta verdad,
con valor no luchamos, mas con arrojo amamos.
Haznos amar los libros, Safo destaca en eso,
no de la edad de Hesíodo, pero sí de su mérito. 90
Si las almas no tienen sexo, cual se declara,
no son de varón o hembra los mejores poemas:
llamar no debe el hombre, femeninos los versos,
en los que el sentimiento es recio y varonil.
Verdad es que Apolo es el juez del ingenio,
mas son nueve mujeres las de la docta tropa:
leyes en la que Numa constaba como esposa,
le fueron susurradas por la sabia Egeria
.
Numa fue un rey reverenciado por los romanos por su sabiduría y piedad. Respaldado por Júpiter, se
piensa que tuvo una relación directa y personal con un número de deidades, la más célebre la ninfa
Egeria, quien según la leyenda le enseñó a ser un legislador sabio. Ovidio cuenta su leyenda en el libro
XV de las Metamorfosis (vv. 482-551), relatando que la ninfa Egeria se convirtió en su esposa. Según
Tito Livio (Ab Urbe condita), Numa aseguró que había mantenido reuniones de noche con Egeria sobre
la manera correcta de establecer ritos sagrados para la ciudad. Plutarco (Vidas paralelas) sugiere que
se aprovechó de la superstición para darse a mismo un halo de temor reverencial y fascinación
divina, y así poder cultivar comportamientos más amables entre los belicosos romanos primigenios,
tales como honrar a los dioses, respetar la ley, comportarse humanamente ante los enemigos, y vivir
apropiadas vidas respetables. En el Gran Diccionario Histórico o Miscelánea curiosa de la Historia
Sagrada y Profana, tomo VI: M-O, traducido del francés de Luis Moreri por Don Joseph de Miravel y
Casadevante, París: Hermanos De Tournes libreros, 1753, podemos leer una breve, pero completa
relación de Numa: “ Numa Pompilio, segundo rey de los Romanos, era de Cures, ciudad del país de los
Sabinos, e hijo de Pomponio Pompilio. Intruidos pues los romanos de su gran probidad pasaron a
cogerlo a su ciudad para hacerlo rey de ellos, después de la muerte de Rómulo el año 4o de Roma y
714 antes de Jesucristo. Restableció muchas ceremonias sagradas, a fin de dulcificar por medio de la
religión el genio o natural feroz de este pueblo bárbaro, edificó un templo a Vesta, escogió doncellas
que hacían voto de castidad, y que cuidaban de guardar el fuego sacro, y estableció ocho colegios de
sacerdotes de Marte, de los Augurios, de los Salienos, de los Curiones, de los Flaminios, de los
Feciales, &c. Ordenó también el culto de Jano, a dos caras. Dividió el año en 12 meses, y publicó leyes
importantísimas, haciendo creer al pueblo no comprendía cosa sino por orden y con parecer de la ninfa
Egeria. Este rey había casado con Tatia, hija de Tatio, colega de Rómulo, de la cual tuvo cuatro hijos,
progenitores de cuatro familias, y una hija que casó con Tulio Hotilio que le sucedió. Algunos antiguos
dijeron que era Pitagórico, pero es cosa visible se engañaron, pues Pitágoras no vivió sino en tiempo
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
64
Skopos 13 (2022), 51-68
La madre de los Gracos
les enseñó elocuencia,
transmitió de sus pechos osadía y buen juicio; 100
y las solemnes barbas que en Roma hablar la oyeron,
sin rubor se instruyeron, para vencer después.
Como el de ella, tu prédica respeto impone a todos,
Tus análisis son como el de ellas, retóricos:
algo ven de grandeza los hombres en tus versos,
los que ellos elevan con majestuosidad.
La opinión del sabio y noble conde Orrery
fue muy observada cuando oyó tu poesía:
todos dijeron, nunca se vio una mejor pareja,
si la viuda de Pompeyo fuera la reina de Arsamnes
. 110
Pompeyo, que más grande que él llegó a ser
ahora en tu poema, siéndolo antes en Roma;
y mucho más perenne en plumas de poetas,
viven los grandes príncipes, más que las grandes torres.
Premió, por su traición al desleal Egipto,
desde entonces su ruina es cantada por ti;
y aún así, si acaso pereciera de nuevo,
no haría Orinda sino celebrar su caída.
Así, jovial la abeja se deleita en morir,
presintiendo yacer en una tumba de ámbar. 120
Si todo Egipto para que purgara su crimen
sobré él elevara una enorme pirámide,
Pompeyo en ese túmulo menos noble yaciera,
de lo que lo hace ahora, Orinda, en tu poema:
eso hace Cornelia por su ofrenda a Pompeyo,
su mano plantará su laurel en tu frente:
tan parejos en méritos ambos fueron hallados,
que coronó la fama a poetas y príncipes:
de Tarquino el Anciano o Antiguo. Numa reinó 42 años, y murió el 82 de Roma, y el 672 antes de
Jesucristo. (p. 363)”.
Cornelia (h. 189-100 a. C.) fue hija del famoso Escipión el Africano, vencedor de Aníbal y madre de
los Gracos, cuyos actos políticos tuvieron una enorme influencia en la historia de Roma. Para los
romanos es el modelo de madre, por la educación que transmitió a sus hijos, formándolos para que
accedieran a los primeros cargos políticos. Fue la primera mujer en ser honrada con una estatua de
bronce en el Campo de Marzo.
La viuda de Pompeyo fue Cornelia, y en la obra de Corneille que versiona K. P. no hay ningún
personaje de ese nombre, nombre que se corresponde con el de un antiguo rey de Persia: Arsames,
abuelo del rey Darío I, y miembro de la Dinastía Aqueménida.
La autora del poema eleva a Pompeyo por encima del rey persa Arsames.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
65
Skopos 13 (2022), 51-68
lo que en la sien del gran Capitán muerto estaba,
goza ella brotar viéndolo de nuevo en tu cabeza. 130
Cornelia
en la roca francesa brilló por vez primera,
mas no como debía hasta entrar en tu pluma:
poemas, como gemas, de lugar trasladados
donde habían crecido, otra gracia adoptaron,
vestidos por tu mano y pulidos por tu pluma;
brilla ahora cual estrella, antes sólo era joya:
lacra alguna no queda, ni nube, todo es luz,
diáfana cual el día, sus partes más brillantes.
Corneille, ahora en inglés, así se acrecienta,
cual árbol trasplantado que con más vigor vive. 140
Así el buril
cavado por manos cual las tuyas,
pulido y tallado más rico es que la mina.
Los licores vertidos de una vasija a otra,
deben perder aromas y apenas los recobran:
mas los vinos franceses, en sus raras vasijas,
por ti a las nuestras traídos, son espirituosos;
de un bouquet tan intenso, que los hacen jugosos:
elegirían el tuyo, antes que el de Corneille.
Él se halla iluminado aquí, donde la sombra
de sus propias palabras se mostraba oscura: 150
lo que habría dicho, tal cual lo ve escrito,
tan generosamente, ajustado al decoro.
Cuando con más palabras que él fluir te place,
cual riada que se extiende, fertilizando el suelo,
lucrando su sentido tan bien intencionado,
y por ti él consigue otro plus de excelencia.
Verter término a término, a la antigua usanza,
no es sino transcribir, mas nunca traducir
:
Hay un juego de palabras en el verso: Cornelia, con el autor francés Corneille.
La autora del poema utiliza, creo que erróneamente, la figura del remo, oar, para describir la tarea
del minero.
Posible alusión al famoso pasaje del Arte poética de Horacio en el que abordaba el problema de la
traducción y del grado de fidelidad que ésta debe al original, versos 131-135 de su Epístola a los
Pisones:
Publica materies priuati juris erit, si
non circa uilem patulumque moraberis orbem,
nec uerbo uerbum curabis reddere fidus
interpres nec desilies imitator in artum,
unde pedem proferre pudor uetet aut operis lex.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
66
Skopos 13 (2022), 51-68
en tu creatividad, leemos a Corneille
en su sentido auténtico, y a Orinda también: 160
y, sin embargo, ambos sois tan parecidos,
como cuando dos velas crean brillantes llamas.
y sin duda el honor del copista no es pequeño,
al dudar los artistas sobre el original.
Mas si tu presa Musa es así alabada,
¿qué grandes cosas cuando ella es libre escribes?
¿Si es libre de elegir palabras y el sentido,
o cualquier otro tema que el ancho mundo ofrezca?
Un cristalino mar que se desliza bien muestra
cuán suave, claro, pleno y rico fluye tu verso: 170
cribas y eliges voces, no por casualidad,
sino por dar sentido, cual si anagramas fueran.
Tus feraces palabras se adaptan al sentido,
cual las damas de honor a una Reina de Estado.
No es el blanco satén el que hace un verso más blanco
,
o suave; son hierro ambos, escribe tú en él.
Tu verso viene ahormado, no tienes que pulirlo,
ni en un audaz calor forjarlo y refinarlo.
Mas ¿por qué dedicarte todos estos elogios?
¿Quién lo duda, o no acepta tal como es debido? 180
Rumor que poco estimas, y que no necesita
la que como la abeja, se nutre de su néctar.
Hay, quien cual débil ave, con los gritos se cae,
Aletargado ante los gritos cuarteleros:
no pudiendo aguantar los vítores, se caen,
mareados de alabanzas, sus alabanzas fúnebres
.
Pero tú, Orinda, muestras tanta indiferencia,
como si al elogiarte lo hiciéramos con otra.
Así, igual que el Sol, tú en tu curso brillas,
impasible ante toda nuestra admiración: 190
sobre el halago alzándote, podemos apreciar
(Lograrás dominar cualquier asunto público,
si no pierdes el tiempo en lo vulgar y nimio,
ni buscas trasladar -cual servil traductor-
palabra por palabra, o, imitando, situarte
en un estrecho marco del que ya no saldrás).
Es decir: el asunto tratado no es el que confiere valor al poema.
Referencia a la práctica de la adivinación utilizada por los romanos, basada en el comportamiento de
los pájaros, que caían del cielo desvanecidos por los gritos de los soldados.
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
67
Skopos 13 (2022), 51-68
que tu ingenio es mayor a fuer de ser humilde.
Referencias bibliográficas
(Ediciones de sus obras):
Poems. By the Incomparable Mrs. Katherine Philips, London, J.G. for
Richard Marriott, 1664.
Poems by the Most Deservedly Admired Mrs. Katherine Philips, The
Matchless Orinda, To which is added, Monsieur Corneille's Pompey &
Horace, Tragedies. With several other Translations out of French,
work in charge of Sir Charles Cotterell, Introduction by Travis DuPriest
London, Herringman, 1667.
Poems by the most deservedly Admired Mrs. Katherine Philips, the
Matchless Orinda, to which is added Monsieur Corneille's Pompey
and Horace, with several Others Translation out of French, London:
Printed for Jacob Tonson, 1710.
Katherine Philips (‘Orinda’), Selected Poems, ed. J.R. Tutin (3rd edition), The
Orinda Booklets, Extra Series I, Hull, 1905.
Minor Poets of the Caroline Period, Volume I, ed. George Saintsbury.
Oxford, 1905 (reprinted 1968), pp. 485-612.
A Critical Edition of the Poetry of Katherine Philips. Catherine Cole
Mambretti, (unpublished Ph.D. dissertation, University of Chicago,
1979).
An Edition of the Poems and Letters of Katherine Philips, 1632-1664 Ed.
Patrick H.B. Thomas, (unpublished Ph.D. dissertation, 3 vols,
University of Wales, Aberystwyth, 1982).
The Collected Works of Katherine Philips The Matchless Orinda, 3 vols
(Stump Cross, Essex): Volume I: The Poems, ed . Patrick Thomas
(revised by Germaine Greer) 1990. Volume II: The Letters, ed. Patrick
Thomas (revised by Germaine Greer) 1992. Volume III, The
Translations, ed. Germaine Greer and R. Little (1993).
(Otras obras):
CANFIELD, D. F. (1904): Corneille and Racine in England, New York: The
MacMillan Company.
CHALMERS, Hero (2004): Royalist Women Writters 1650-1689, Oxford:
Clarendon Press.
GARCÍA CALDERÓN, Á. (2008): “Katherine Philips traductora de Saint-
Amant y Corneille”, Hikma. Translation Studies, nº7, UCOPress, pp.
77-94.
GARCÍA CALDERÓN Y TORRALBO CABALLERO (2020): Katherine
Philips: Obra poética. Edición bilingüe de Ángeles García Calderón y
Ángeles García Calderón
Philo-Philippa”: to the excellent Orinda: un poema laudatorio
68
Skopos 13 (2022), 51-68
Juan de Dios Torralbo Caballero. Madrid: Ediciones Cátedra (Letras
Universales).
Gran Diccionario Histórico o Miscelánea curiosa de la Historia Sagrada y
Profana, tomo VI: M-O, traducido del francés de Luis Moreri por Don
Joseph de Miravel y Casadevante, París: Hermanos De Tournes
libreros, 1753
HAGEMAN, Elizabeth H. (1987): ‘Katherine Philips The Matchless Orinda’ in
Women Writers of the Renaissance and Reformation, ed. Katharina
M. Wilson. Athens, Georgia, pp. 566-608.
PATRICK, Th. (1988): Katherine Philips (‘Orinda’). Writers of Wales’,
University of Wales Press.
RUDRUM, Alan (Ed.) (2001): The Broadview Anthology of Seventeenth-
Century Verse & Prose. Vol. I: Verse. Edited by Alan Rudrum, Joseph
Black & Holly Faith Nelson, Broadview Press.
SOUERS, Philip Webster (1931): The Matchless Orinda. Cambridge,
Massachusetts (reprinted 1968).
STEVENSON, Jane and DAVIDSON, Peter (Eds.) (2001): Early Modern
Women Poets (1520-1700). An Anthology. Oxford University Press.